El té con un poquito de azúcar, en una taza lo suficientemente grande para dejarme aun con sed.
El olor es dulce, mi lengua áspera la taza calienta lo suficiente para no quemar.
Mí querido arlequín:
Las horas pasan rápido, esta noche me di cuenta, las horas pasan rápido, no he dormido, no tengo sueño, temo dormir y quedarme dormida durante muchas horas…
Las horas pasan rápido, la noche no se hace nada, mas aun en pocas horas te pienso…
Se me hace un nudo en la voz, un fuerte retorcijón en mi panza, me da asco saber de ti, saber que ya no te conozco, aun así te extraño, quisiera poder abrazarte, darte unos de esos abrazos que nunca doy, mirarte a esos hermosos ojos cafés y sentir tu olor impregnado en mi ropa… te convertiste en lo que mas quiero… te convertí en lo que mas sueño…
Aun así no me dejas ese vació que duele llenar, cuesta, me cuenta dejarte de lado.
Sonrió al cielo, cae una gota, rodea mi mejilla, diré que es la lluvia, diré que es el cielo llorando… al final no diré nada…
Probablemente no sepa todo sobre ti, aun así entre mil millones de personas te conocí…
Mis manos son frías cada ves tengo mas cicatrices que sanan rápido, el viento pasa fuerte y rápido, ya no son noche u horas las que pasan, son simples ilusiones que estarás en algún momento por mi camino… cada ves mi piel es mas pálida, y mis ojos se ven mas verdes que cafés, mis labios siguen siendo secos y me cabello esta aun mas largo, no he crecido, parece que cada día me encoja mas, ya casi no tengo fuerza…
La noche pasa rápido, las horas volando, poco a poco se apaga el amor, mas no muere el sentimiento…
Mi querido arlequín, siempre un pedazo de mi corazón será tuyo…
Nee, en primavera… debajo del árbol de quinta normal… esa tarde donde “esperare” era todo lo que podíamos decir…debí haberte querido más…
Munashii dake
Solo mentiras
